Entre gallos de media noche, la Policía Nacional en coordinación con la Municipalidad de la Victoria, acordonó el perímetro de las diez cuadras que conforman el emporio comercial de Gamarra.
La inspección que no podía ser postergada más tiempo por las autoridades, siempre y cuando, claro, no se quiera cometer los mismos errores que en vísperas a la navidad acontecen - como el incendio de Mesa Redonda en el 2002, por ejemplo- alteró a más de un comerciante, que en la confusión de no saber qué acontecía en el interior de sus locales, se apostaron en las intermediaciones a increpar la actitud de las autoridades.
Les agarró de sorpresa y muchos comerciantes la catalogaron como una inspección no anunciada.
Les agarró de sorpresa y muchos comerciantes la catalogaron como una inspección no anunciada.
Entre las rejas la policía impidió el paso a los comerciantes desde primeras horas.
El desconcierto y la desesperación por ingresar al emporio era en general.
La Policía Nacional resguardó las nueve puertas de acceso al emporio.
Se desplegó a la Policía Montada.
El personal del municipio apoyó en la limpieza de las calles.
¡Ampay!, se encontraron muchas conexiones clandestinas.
Se aprovechó en retirar la publicidad de campaña política.
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